La industria de las bebidas lleva años enfrentándose a nuevos retos. Por un lado, el descenso de las ventas y el aumento de los costes de los ingredientes, el gas natural y la electricidad dificultan la cobertura de los costes de producción. A ello se suman las crecientes exigencias de sostenibilidad por parte de políticos y consumidores, que demandan un replanteamiento de la producción. Muchos fabricantes de bebidas y cervecerías ya están apostando por soluciones innovadoras, como la digitalización de las instalaciones de producción, para seguir siendo rentables a largo plazo. Las soluciones de almacenamiento de energía también contribuyen a reducir las necesidades energéticas y, por tanto, disminuir los costes de la energía.
Retos actuales de la industria de las bebidas
El cierre generalizado de restaurantes durante la pandemia de coronavirus también causó considerables pérdidas económicas para el sector de las bebidas. Además, durante el mismo periodo se cancelaron miles de eventos, lo que supuso pérdidas masivas, en particular, para las cervecerías. La industria de las bebidas sigue notando las consecuencias a día de hoy.
Actualmente, los productores también se enfrentan cada vez más al hecho de que los consumidores carecen de poder adquisitivo para consumir grandes cantidades de bebidas debido a la inflación. La caída de los ingresos sigue viéndose compensada por los elevados costes de la energía y los ingredientes. La industria debe replantearse sus procesos y prepararlos para el futuro (sobre todo haciéndolos más eficientes desde el punto de vista energético) para seguir siendo competitiva a pesar de todas las dificultades.
El aumento de los precios de la energía afecta a las empresas
Los procesos de fabricación de la industria de las bebidas exigen una gran cantidad de energía. El aire comprimido, necesario para el secado, la limpieza y la clasificación, representa una gran parte de los costes energéticos. Además, tanto las mezcladoras como los sistemas de llenado y los paletizadores consumen mucha energía.
En la producción de cerveza y agua mineral, así como de refrescos y zumos de fruta, las empresas llevan varios años recurriendo principalmente al gas como fuente de energía. Una evolución que ha disparado los costes de la energía, sobre todo a raíz del conflicto de Ucrania. Las asociaciones de la industria alemana de las bebidas advirtieron en una declaración conjunta en 2022 que casi ninguna empresa del sector podía cubrir sus costes con los actuales precios de mercado del gas y la electricidad.
Aumento de los costes de los ingredientes y los productos preliminares
Al igual que los productores de bebidas, sus proveedores también se han visto afectados por el aumento de los costes energéticos, que incrementa aún más los costes de producción y reduce los márgenes. Los precios de ingredientes como la malta y la fruta se han triplicado en algunos casos. La industria del vidrio, un importante proveedor, también está luchando contra la fuerte subida de los precios de la energía. Según la Asociación de Cerveceros Alemanes el coste de las botellas de vidrio aumentó un 140 % entre principios de 2022 y junio de 2023. Además, existen dificultades considerables en la cadena de suministro debido a que gran parte del vidrio destinado al mercado europeo se producía antes en Ucrania y Rusia.
¿Cómo pueden los fabricantes de bebidas y las cervecerías producir de forma más sostenible?
Además de los costes de los ingredientes y los productos preliminares, las empresas también deben tener en cuenta el aumento de los costes de los derechos de emisión en la UE. Mientras que cuando se introdujo el comercio de derechos de emisión en 2005 eran inferiores a diez euros por tonelada de CO2, ahora los costes ascienden hasta a 100 euros por la misma cantidad de emisiones de CO2. Además de los políticos, los consumidores exigen cada vez más productos fabricados de forma sostenible y que protejan los recursos. Una mayor sostenibilidad en la producción de bebidas ya no es tan solo una opción, sino la base del éxito económico y la supervivencia a largo plazo. A pesar de las dificultades financieras del sector, es esencial invertir en tecnologías sostenibles e innovadoras.
Automatización y digitalización
Un paso importante hacia un futuro económicamente viable reside en la digitalización y automatización de los procesos de fabricación. Se necesitan programas de supervisión eficaces, consistentes en una red de dispositivos de control digital del rendimiento que transmitan datos sobre el consumo de energía y las necesidades de ingredientes. Los sensores inteligentes, combinados con programas informáticos de análisis, permiten optimizar los procesos y ahorrar energía. Y todo ello con una calidad constante.
Este cambio en el proceso de fabricación presenta todavía más ventajas: el tiempo de inactividad por reparaciones y mantenimiento puede predecirse, por lo que se acabaron las paradas inesperadas que limitan la productividad. Al mismo tiempo, se consigue la mejor eficiencia energética posible porque las máquinas están en condiciones óptimas de funcionamiento.
Ejemplos de éxito en la digitalización de las instalaciones de producción
El ejemplo de Carlsberg/Holsten demuestra lo eficaz que puede ser la aplicación de este tipo de soluciones: gracias a la digitalización, las plantas de embotellado de la nueva fábrica de cerveza de Holsten en Hamburgo-Hausbruch, construida en 2022, utilizarán un 25 % menos de agua y un 34 % menos de energía que las antiguas instalaciones de producción.
El gigante de las bebidas Coca Cola también ha invertido ya en elementos integrales de fábrica inteligente y ha implantado un sistema de supervisión llamado «LineView», que registra todo el sistema y muestra todos los datos de producción en tiempo real. De este modo, los problemas y las pérdidas en toda la línea pueden detectarse de inmediato y de un vistazo, y puede aumentarse la eficiencia global de la planta.
Almacenamiento de energía para la producción sostenible de bebidas
Aumentar la eficiencia y el ahorro energético mediante soluciones de fábrica inteligente es un componente importante para la sostenibilidad y la rentabilidad. Para lograrlo, también es una opción el uso de soluciones innovadoras de almacenamiento de energía que faciliten además la integración de las energías renovables. La capacidad de almacenar energía, como la que ofrece la ThermalBattery™ de ENERGYNEST, por ejemplo, permite a las empresas cambiar su suministro de energía a renovables sin que la volatilidad de estas últimas ponga en peligro la seguridad del abastecimiento. La electricidad también puede comprarse de forma rentable fuera de las horas punta y almacenarse para su uso posterior, lo que permite una atractiva reducción de costes.
Utilización de la ThermalBattery™ con el ejemplo de una cervecería
El ejemplo de una fábrica de cerveza con una demanda de vapor diaria fluctuante de 60 MWh muestra hasta el enorme potencial de ahorro de la ThermalBattery™. En el proyecto desarrollado en colaboración con ENERGYNEST, una unidad de almacenamiento con una capacidad de 30 MWth se integra en la planta existente en combinación con una caldera eléctrica de vapor (10 MWth). La electricidad necesaria para hacer funcionar la caldera de vapor se extrae principalmente de un sistema fotovoltaico existente o del mercado intradiario de electricidad en épocas de precios bajos y se almacena en la ThermalBattery™ para su uso posterior. En este caso, se pueden ahorrar hasta 17,1 GWh de gas natural al año y, por tanto, 3,4 toneladas de CO2 al año. Un paso importante hacia una producción de bebidas más sostenible y competitiva a largo plazo.