Ya se utilice en botellas de bebidas, envases de medicamentos, vidrio para ventanas o fibra de vidrio, el vidrio es un componente de muchos productos fundamentales utilizados en la vida cotidiana. Sin embargo, también se enfrenta actualmente a inmensos retos. Los enormes aumentos del precio del gas en los últimos años y la exigencia simultánea de procesos de producción más sostenibles suponen un reto para toda la industria. Se necesitan soluciones innovadoras para garantizar que la industria del vidrio siga siendo competitiva a largo plazo.
Retos actuales de la industria del vidrio
La industria del vidrio es especialmente importante como proveedora de otros sectores como la industria de bebidas. La creciente presión sobre los precios por parte de compradores y clientes está intensificando la tensión en la industria. Como industria de alto consumo energético y procesos delicados, depende especialmente de un suministro energético seguro y constante, por lo que está sufriendo considerablemente la subida de los precios del gas natural.
Industria del vidrio muy dependiente del gas natural
El consumo total de energía de la industria alemana del vidrio, por ejemplo, ascendió a unos 289 petajulios en 2021, lo que la sitúa en cuarto lugar entre todas las industrias (fuente: Statistisches Bundesamt). Hasta el 85 % de esta cantidad corresponde únicamente al proceso de fusión del vidrio. Este proceso requiere temperaturas extremadamente altas, de más de 1.000 grados, que todavía hoy se cubren principalmente con gas natural. Los enormes aumentos del precio del gas -provocados principalmente por la guerra de Ucrania- amenazan la existencia de muchos fabricantes de vidrio. Buscan formas de cambiar partes de sus procesos a formas alternativas de energía. Uno de los problemas son los largos plazos de adaptación de los procesos de producción.
Procesos dependientes de un suministro energético fiable
Esto se debe a que los elevados requisitos de calidad y los sistemas de funcionamiento permanente apenas permiten fluctuaciones en el suministro de energía, sobre todo para evitar daños en los costosísimos tanques de fusión. Incluso un breve fallo basta para destruirlos por completo. Además, los hornos de gas convencionales, con una vida útil de 20 años, representan inversiones a largo plazo para las empresas, por lo que se utilizan durante el mayor tiempo posible. Los operarios de las fábricas de vidrio temen que el cambio a hornos puramente eléctricos entrañe un alto riesgo técnico, ya que la producción existente no puede reconvertirse fácilmente.
Mantener la competitividad de la industria del vidrio
No obstante, la industria del vidrio debe reducir las emisiones de CO2 para seguir siendo sostenible y económicamente viable, especialmente con el aumento de los precios de los certificados de CO2. Además del cambio a las energías renovables, el uso eficiente de la energía es también un factor importante para reducir las emisiones, disminuir los costes y seguir siendo competitivos a largo plazo.
Aumentar la eficiencia energética
Aumentando la eficiencia energética, las empresas pueden reducir considerablemente su consumo de energía primaria y recortar así sus emisiones y costes energéticos, por ejemplo, mediante soluciones de recuperación del calor residual. El uso de tecnologías digitales puede ayudar a identificar y aprovechar el potencial sin explotar en este ámbito. Los sistemas inteligentes de gestión de la energía supervisan los procesos y garantizan un control óptimo de los sistemas. También ayudan a mejorar la transparencia con respecto al estado energético de los sistemas y procesos.
Otra forma de aumentar la eficiencia energética es el reciclado, es decir, el aprovechamiento del vidrio usado. Como los procesos químicos necesarios para fundir las materias primas ya se han completado, se consume un 25 % menos de energía para fundir la chatarra de vidrio pura que para fundir materias primas. Sin embargo, debido a los elevados requisitos de calidad, esto no es posible en el caso del vidrio plano, sino únicamente en el del vidrio para envases.
Cambio a energías renovables
Para reducir eficazmente las emisiones de CO2, no hay alternativa al cambio a las energías renovables a largo plazo. El hidrógeno verde suele utilizarse como sustituto del gas natural, pero su escasa disponibilidad y su elevado precio plantean un problema. Las altas temperaturas y los procesos de alto consumo energético necesarios durante la producción de vidrio hacen que la electrificación directa sea mucho más complicada que en otras industrias. Una opción es utilizar hornos con calefacción eléctrica auxiliar instalada para cubrir al menos parte de las necesidades energéticas con electricidad verde. Compensar la volatilidad de la energía eólica y solar será crucial para proporcionar un suministro fiable de energía. Las soluciones de almacenamiento de energía desempeñan aquí un papel importante.
Almacenamiento de energía térmica para una industria del vidrio sostenible
El almacenamiento de energía desacopla la producción y el consumo de energía, lo que permite flexibilizar considerablemente los procesos y utilizar la energía disponible de forma más eficiente. También asegura el suministro en caso de apagones. Los sistemas de almacenamiento de energía térmica, como la ThermalBattery™ de ENERGYNEST, también ofrecen la opción de capturar el exceso de calor residual y almacenarlo para su uso posterior. Esto aumenta aún más la eficiencia energética. La integración sin complicaciones de la ThermalBattery™ en los procesos existentes la convierte en una solución innovadora que puede implantarse a corto plazo.